Ferrovial y otras empresas que se van de España: un peligrosísimo precedente para la economía
La decisión del Gobierno de Pedro Sánchez de subir los impuestos podía acarrear consecuencias y éstas no han tardado en salir a flote. Sánchez instauró en 2020 un cambio en el Impuesto de Sociedades que tenían gran importancia para las multinacionales con un alto porcentaje de sus beneficios en el extranjero.
La empresa española de construcción Ferrovial, anunció ayer mediante una publicación en su página web, su decisión firme de abandonar España, convirtiéndose en la primera compañía importante para el país que decide trasladar su sede a otro parte. La salida del país aun tiene que ratificarse en una junta de accionistas, pero todo parece indiciar que el anuncio será una realidad, y que la fuga empresarial no acaba más que empezar.
Pérdida para la economía española
Con la decisión de Ferrovial con Rafael del Pino a la cabeza, España perderá 285 millones de impuestos. La constructora española, con un precio en Bolsa de 18.000 millones, ha declarado que se marchan a Países Bajos, un hecho que le reportará beneficios fiscales importantes.
La empresa, que se argumenta en que la mayor parte del negocio (un 86% de los ingresos y un 96 % de su valor bursátil) lo genera en el extranjero, en su anuncio publicado en la web no solo anuncia su retirada de España sino que además resalta a la economía neerlandesa por su potente solidez financiera y la estabilidad.
En este sentido, se ha afirmado que “Los Países Bajos tienen, y han tenido durante décadas, las mejores calificaciones crediticias apoyadas en bajos niveles de endeudamiento sobre PIB y una política presupuestaria históricamente prudente. Desde principios de la década de los noventa, ha recibido sistemáticamente calificaciones AAA de las principales agencias, con la sola excepción del período entre 2012 y 2015”.
Apunta Ferrovial en su publicación que las compañías con sede en los Países Bajos se han beneficiado de una menor volatilidad en sus costes de financiación gracias a una prima de riesgo del país más estable en comparación con otros países europeos, algo que opinan que hará que en un futuro se reduzcan los costes de financiación de las emisiones de deuda.
Desde los altos cargos de la compañía, se está convencido de que las grandes oportunidades para el futuro están fuera de España, a lo que se suma que el 93% de los inversores institucionales de la empresa son internacionales, algo que beneficia la cotización en Países Bajos.
Consecuencias inminentes
Además de perder millones de euros, las consecuencias de la marcha de Ferrovial serán otras igualmente importantes. En este sentido, el cambio de sede de la empresa constructora hará que probablemente los ejecutivos también decidan trasladar sus domicilios a Países Bajos, ya que además de que la empresa se encuentre allí, encontrarán beneficios al ahorrarse el impuesto de las grandes fortunas.
Del mismo modo, los argumentos ofrecidos por Ferrovial pueden llevar a que otras grandes multinacionales españolas decidan tomar cartas en el asunto como ha hecho la constructora. Esto puede suponer el pistoletazo de salida para que otras empresas decidan domiciliarse fuera de nuestro país y así obtener beneficios económicos.
Otra consecuencia que se deriva de la marcha de Ferrovial o de las multinacionales que así lo decidan es que España perderá, además de la recaudación del Impuesto de Sociedades y de las Grandes Fortunas, a muchas personas con un alto poder adquisitivo que dejarán de pagar el IRPF y el IVA en el país.
El futuro se abre para Ferrovial
La compañía de la familia del Pino cree que con el cambio de sede, la empresa obtendrá mayor notoriedad en su marca tanto en Europa como fuera, de forma que podrán llegar a gozar de “una cantera aún mayor de talento internacional, que Ferrovial espera atraer gracias a su cartera de proyectos pioneros y estimulantes”.
La intención que tiene Ferrovial de dar el salto a la cotización en Estados Unidos es otra de las grandes oportunidades que se le ponen por delante. Para ello, es necesario que la constructora entre en el mercado de valores de Holanda como previa “a a la futura admisión a negociación de esas mismas acciones en los Estados Unidos y, de darse las condiciones para ello, su inclusión en los índices bursátiles estadounidenses”. Se añade que “Por el contrario, las acciones de una sociedad española cotizada en España solamente pueden negociarse en los Estados Unidos a través de American Depositary Receipts (ADR) u otras fórmulas indirectas, y los American Depositary Receipts no son elegibles para acceder a los índices bursátiles estadounidenses”.
Ferrovial obtuvo un beneficio neto de 186 millones de euros en 2022, y ahora con su cambio de sede a Países Bajos la empresa se ahorrará un 5% de los impuestos que actualmente paga en nuestro país. La decisión parece muy clara por parte de los hermanos del Pino que ahora tienen que esperar a ver que dicen el resto de sus accionariados.