¿Por qué la mayoría cree que ENISA no trabaja la primera mitad del año?
Artículo realizado por Iván García Berjano, director de Finanziaconnect.
Ayer estuve hablando con un cliente y me comentó algo que oigo todos los años. “De momento no solicito un préstamo a ENISA porque aún no se han puesto en marcha”.
¡Un grave error!
ENISA ANALIZA OPERACIONES TODO EL AÑO
No nos confundamos, que no se haya liberado los fondos y no estén firmando operaciones no significa que no estén analizando operaciones. En definitiva, el año pasado sirve como ejemplo más extremo; cuando se firmó la primera operación de Enisa ya era demasiado tarde, todos los proyectos que se financiaron ya se habían analizados.
Y es que el proceso político-administrativo nada tiene que ver con los procesos internos de ENISA para el análisis de proyectos:
Para la liberación de fondos y por tanto, firma de préstamos de ENISA es necesario que los Presupuestos Generales del Estado estén aprobados. Lo normal es que se aprueben en el último trimestre del año anterior, pero en los últimos años con la inestabilidad política se están aprobando en el mes de junio. Además, una vez aprobados tienen que pasar un trámite administrativo interno de firma de convenios con el ministerio (DG de la Pyme) y posteriormente se lleva a Consejo de Ministros y ya se liberan los fondos. Es decir, desde que se aprueban los presupuestos ENISA y cuenta con que llegarán los fondos, incluso antes porque es algo ya recurrente, pero son muchos los trámites para que dispongan de ellos de forma oficial. En definitiva, a Enisa conviene prestar tu solicitud cuando a tu empresa le conviene, sea febrero, julio o septiembre. Presentado tu solicitud entrará en el proceso análisis en el orden de entrada de proyectos. El proceso de liberación de fondos sólo debe preocupar al emprendedor para tener en cuenta el plazo más probable del último paso; el cobro del préstamo.
¡AYUDAS PLANIFICADAS, POR FAVOR!
Ojalá llegue un gobierno español que se dé cuenta que para ser más efectivas, las ayudas a las empresas deben estar sujetos a procesos continuos y planificados, y no sufrir el incertidumbre de los procesos de las convocatoria cerradas. Desgraciadamente contamos con muchas líneas interesantes que nunca se sabe cuándo saldrán, como Emprendetur, o si no el problema de la liberación de fondos que hace de la firma de operaciones de Enisa un misterio cada año.
Las empresas necesitan ayuda cuando lo necesitan y deberían contar con ayudas que pueda presentarse de una forma continua a lo largo del año, unos plazos de análisis ciertos, junto con tiempos de aprobación y cobro que se pueda planificar… tanto para bien, como para mal. Un buen ejemplo de esto es el Instrumento Pyme. Con esta ayuda de la UE se sabe de antemano cuando puedes presentar tu proyecto, la siguiente convocatoria no está nunca lejos y los procesos son claros y transparentes.