entorno-socioeconomico,-formacion-y-abandono-educativo

Entorno socioeconómico, formación y abandono educativo

Comparte esta entrada



Poco después de la celebración en Funcas de una jornada virtual que analizaba los últimos datos de abandono escolar, el Ministerio de Educación publicaba un análisis adicional que profundiza en los distintos factores que inciden en la salida prematura de los estudiantes del sistema educativo. 

Uno de ellos es el nivel educativo de los progenitores; los datos muestran una clara relación entre el nivel de estudios de las madres y la probabilidad de que sus hijos abandonen los estudios. Como destaca el Ministerio, “la tasa de abandono educativo temprano  disminuye a medida que aumenta el nivel educativo alcanzado por las madres” En 2024, la tasa de abandono entre los jóvenes cuyas madres solo alcanzaron la educación primaria o inferior es del 34,0%, mientras que entre aquellos cuyas madres tienen educación superior, la tasa desciende hasta el 2,3%, lo que implica que la primera es 14,7 veces más alta que la segunda (gráfico 1). Estos datos refuerzan las conclusiones sobre la relación entre el entorno socioeconómico y la desigualdad educativa. La evidencia indica que reducir el abandono educativo pasa no solo por mejoras en la enseñanza, sino también por políticas de apoyo a las familias y al contexto social de los estudiantes más vulnerables.


Nivel de formación y abandono educativo

En la última década, el nivel de formación de los jóvenes en España ha experimentado un avance significativo, contribuyendo a la reducción del abandono educativo temprano. Esta evolución se refleja en el aumento del porcentaje de población de 20 a 24 años que ha completado al menos la segunda etapa de secundaria (gráfico 2). En 2024, este porcentaje ha alcanzado el 79,9%, lo que supone un incremento de 14,1 puntos porcentuales en comparación con 2014 (65,8%) y una ligera mejora respecto a 2023 ( 0,9 p.p., desde el 79,0%).


Desde una perspectiva europea, España ha logrado acercarse a la media de la UE. Aunque no se ha establecido un objetivo europeo para este indicador de cara a 2030, su evolución permite evaluar el progreso de España en la mejora del nivel educativo de su juventud y complementar el análisis del abandono escolar temprano. Las diferencias de género siguen siendo notables. En 2024, el 84,3% de las mujeres de entre 20 y 24 años han completado al menos la segunda etapa de secundaria, una cifra 8,5 puntos porcentuales superior a la de los hombres (75,8%). 

Este avance en los niveles educativos está estrechamente relacionado con la disminución del abandono escolar temprano. Las comunidades autónomas con mayor porcentaje de jóvenes que han completado la educación secundaria superior coinciden con aquellas donde el abandono es menor (gráfico 3). En 2024, las tasas más elevadas se registran en el País Vasco y Cantabria (ambas con un 89,6%), junto con otras seis regiones que superan el 80%.

En el otro extremo, las tasas más bajas corresponden a Ceuta y Melilla, Baleares y Murcia que también presentan cifras más altas de abandono escolar. A pesar de ello, todas las comunidades han experimentado una evolución positiva en la última década. Los mayores incrementos desde 2014 se han observado en Andalucía ( 19,4 puntos), Canarias ( 17,4), Illes Balears ( 15,9), Extremadura ( 15,0) y la Comunidad de Madrid ( 14,5). Estos avances reflejan el impacto de las políticas educativas y los esfuerzos de cada territorio por mejorar la continuidad educativa.


En definitiva, los datos muestran una mejora notable en la formación de la juventud española, lo que ha contribuido a la reducción del abandono educativo temprano. Sin embargo, siguen existiendo desafíos importantes, especialmente en la reducción de la brecha de género y en la convergencia con los niveles educativos europeos. Garantizar que más jóvenes completen su educación secundaria no solo es un imperativo educativo, sino también una inversión en el desarrollo económico y social del país.

Comparte esta entrada



Leer más
la-evolucion-del-abandono-educativo-en-espana-y-sus-implicaciones-en-el-mercado-laboral

La evolución del abandono educativo en España y sus implicaciones en el mercado laboral

Comparte esta entrada



La tasa de abandono educativo temprano ha disminuido del 13,7% en 2023 al 13,0% de 2024, marcando un mínimo histórico. No obstante, sigue siendo la segunda más alta de la Unión Europea, solo superada por Rumanía, y aún lejos del objetivo del 9% fijado por la UE para 2030. El 3 de febrero, Funcas celebró una jornada virtual sobre “Análisis de los últimos datos del abandono educativo en España”. El acto contó con la participación de cuatro expertos para abordar el fenómeno del abandono desde diferentes perspectivas. 

El abandono educativo en perspectiva: evolución y situación actual

Jesús Ibáñez, subdirector general de Estadística y Estudios del Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes, fue el primero en intervenir, explicando la evolución del abandono educativo en España y su comparación con Europa. Recordó que este indicador surge en el marco de la Estrategia de Lisboa como parte de los objetivos europeos en educación y formación. En los últimos 15 años, la tasa de abandono en España se ha reducido drásticamente, pasando del 31,7% en 2008 al 13% en 2024. La diferencia con la media de la UE se ha reducido a 3,5 puntos, ya que en 2023 se situaba en el 9,5%, debiendo seguir con un último esfuerzo para alcanzarla.

Ibáñez destacó que el abandono educativo temprano no solo depende de la participación escolar, sino también de las estructuras del sistema educativo y las oportunidades de formación. En este sentido, subrayó la importancia de los programas de Formación Profesional Básica y Grado Medio, así como la necesidad de facilitar las vías de acceso a la educación secundaria superior. También apuntó a la persistente brecha de género: la tasa de abandono sigue siendo más alta en hombres que en mujeres, una tendencia que se ha mantenido estable a lo largo del tiempo.

El abandono y la desigualdad educativa

Marisa Hidalgo, profesora titular de Fundamentos del Análisis Económico en la Universidad Pablo de Olavide, abordó el abandono desde una perspectiva de equidad. Hidalgo explicó que el fenómeno no afecta por igual a toda la población, sino que está fuertemente condicionado por el entorno socioeconómico y familiar. En España, los jóvenes de familias con menor nivel educativo o situación financiera desfavorecida tienen una probabilidad mucho mayor de abandonar los estudios antes de finalizar la educación secundaria superior. Marisa Hidalgo; también mostró que, por ejemplo, que la tasa de abandono educativo en nuestro país es 5 veces más elevada si ninguno de tus padres tiene estudios superiores. La Profesora Hidalgo también presentó datos que muestran cómo las tasas de abandono son considerablemente más altas en las comunidades autónomas del Sur y señaló que el abandono educativo temprano perpetúa situaciones de desventaja y pobreza por la baja movilidad social española.

En términos de políticas, destacó la importancia de programas de refuerzo educativo como el PROA, que han demostrado tener efectos positivos en el rendimiento académico y la persistencia en el sistema escolar. También subrayó la relevancia de las intervenciones en edades tempranas, dado que cuanto antes se detecte el riesgo de abandono, mayor será el impacto de las medidas correctivas.

Políticas para reducir el abandono educativo

Jorge Sainz, catedrático de Economía Aplicada de la Universidad Rey Juan Carlos, habló en su intervención en el análisis de medidas efectivas para reducir el abandono. Basándose en la literatura económica reciente, destacó la importancia de tres estrategias clave: incentivos y mentoría; la reducción del tamaño de las clases y el uso de modelos de inteligencia artificial para identificar el riesgo de abandono.

Sainz hizo referencia a estudios internacionales que demuestran que las campañas informativas sobre los beneficios de la educación pueden tener un impacto positivo en la permanencia escolar. Asimismo, subrayó que los programas de mentoría han mostrado efectos significativos en la mejora de la motivación y el rendimiento, especialmente entre los estudiantes con más dificultades. Respecto a la reducción del tamaño de las clases, explicó que la evidencia empírica muestra que su impacto es mayor en etapas tempranas de la educación y que los efectos son más positivos en contextos de mayor vulnerabilidad social. Disminuir la ratio alumnos por clase en un estudiante mejora el aprendizaje en un 1% de la desviación estándar, el equivalente a lo que el alumnado aprende en una semana. Además, un menor tamaño de la clase también mejora el funcionamiento del centro y el bienestar de la comunidad educativa en las aulas en donde hay más estudiantes disruptivos, en centros situados en zonas desfavorecidas y con alumnado rezagados.

Finalmente, presentó un estudio en el que ha trabajado junto con Ismael Sanz y Maite Ballestar, en el que se demuestra que los modelos de inteligencia artificial pueden ser herramientas útiles para predecir el abandono educativo y mejorar la asignación de recursos en programas de refuerzo.

El abandono educativo y el mercado laboral

Por último, Marta Martínez-Matute, profesora del Departamento de Análisis Económico de la Universidad Autónoma de Madrid, analizó el impacto del abandono en la empleabilidad y la calidad del empleo. Explicó que los jóvenes sin educación secundaria superior enfrentan mayores dificultades para acceder a trabajos estables y bien remunerados, lo que contribuye a la precariedad laboral y a una mayor incidencia del desempleo juvenil en España.

Martínez-Matute subrayó que el mercado laboral español es especialmente sensible al ciclo económico, lo que significa que en épocas de crisis el desempleo juvenil aumenta de manera desproporcionada. Además, destacó la existencia de una fuerte polarización en el empleo, donde las personas con baja cualificación se concentran en sectores con tareas rutinarias, lo que las hace más vulnerables a los efectos de la automatización y la digitalización.

Comparte esta entrada



Leer más
datos-de-abandono-educativo-en-espana-en-los-dos-primeros-trimestres-de-2024

Datos de abandono educativo en España en los dos primeros trimestres de 2024

Comparte esta entrada



A nivel agregado de país, el abandono temprano tiene muchos efectos: desde menores tasas de crecimiento económico, menos ingresos fiscales y mayor desempleo, hasta una mayor demanda de prestaciones sociales futuras y mayores gastos en sanidad pública o recualificación profesional del capital humano. La tasa de abandono temprano se calcula como la media del porcentaje de población entre 18-24 años que no ha finalizado bachillerato, FP media o FP básica durante los 4 trimestres del año y que, sin haber titulado en estos tres niveles educativos, no ha realizado un curso de formación en las últimas cuatro semanas. La reducción de esta tasa es crucial, ya que las personas sin al menos bachillerato o FP media pueden tener un menor desarrollo social a lo largo de toda su vida, reflejándose en su participación en labores de voluntariado, salud, participación social, problemas con la justicia, entre otros factores que trascienden la educación formal.

Los datos oficiales del Ministerio de Educación, FP y Deportes muestran que la tasa de abandono en España en 2023 ha disminuido desde el 13,9% de 2022 al 13,7% de 2023. A pesar de este descenso, España continúa siendo el segundo país comunitario con más jóvenes que no continúan sus estudios (gráfico 1), tan solo mejor que Rumanía (16,6%) y seguido de Alemania (12,8%). La media de la UE-27 en 2023 fue del 9,5%. La tasa de abandono del 13,7% en España en 2023 nos sitúa aún lejos del objetivo de la UE en Educación y Formación (Education and Training Monitor Report de la UE) para 2030 de situarse en el 9%.


La evidencia muestra que el estatus socioeconómico de los estudiantes y el entorno familiar, incluyendo el nivel educativo de los padres, el origen inmigratorio, la etnia y el conocimiento del idioma de instrucción influyen en la posibilidad de que un joven abandone tempranamente los estudios. En España, los estudiantes cuyas madres tienen como máximo nivel de educación la educación primaria tenía catorce veces más probabilidades de abandonar los estudios sin finalizar Bachillerato o FP Media, en comparación con los estudiantes cuyas madres habían completado una educación terciaria (Ministerio de Educación, FP y Deportes, 2024). Así el abandono de los jóvenes con madres que tienen educación hasta Primaria es del 35,5%, por el 2,4% de jóvenes con madres con educación superior (gráfico 2)


El gráfico 3 muestra la evolución del abandono temprano de la educación-formación en la Unión Europea (UE) y en España desde 2002 hasta 2023. Se observa una tendencia decreciente, indicando mejoras significativas en la continuación de los estudios de los jóvenes europeos, en general, y españoles en particular. En 2002, la tasa de abandono en la UE era del 16,9%, mientras que en España era considerablemente más alta, con un 30,9%. A lo largo de los años, España ha mostrado una notable mejoría, reduciendo a menos de la mitad su tasa de abandono para 2021, cuando se registró el mínimo histórico del 13,3%. Paralelamente, la tasa en la UE también ha disminuido consistentemente, alcanzando un 9,8% en 2020. Sin embargo, a pesar de la mejora, España sigue mostrando tasas de abandono superiores al promedio de la UE, lo que muestra que aún quedan desafíos por abordar para acercarse al promedio europeo en esta materia. Además, la disminución del abandono en España parece haber encontrado una resistencia importante desde 2021 en la barrera del 13,3%.


El gráfico 4 muestra los datos de abandono educativo de por trimestres entre 2021 y 2024 de España. La tasa de abandono educativo temprano en el primer cuatrimestre de 2024 en España fue del 12,6 % (en comparación con el 13,0% del primer trimestre de 2023) y del 13,3 % en el segundo trimestre (13,7% en 2023). La media móvil, es decir el promedio de los últimos cuatro trimestres (los dos últimos de 2023 y los dos primeros de 2024), es del 13,4 %. Es decir, que la tasa de abandono educativo temprano en España en 2024 está siendo algo más baja que el 13,7% de 2023, pero similar al 13,3% de 2021. La cuestión de si el abandono va a disminuir en 2024 con respecto al mínimo que se alcanzó en 2021 se va a dirimir, en los dos últimos trimestres de 2024 de la Encuesta de Población Activa. En 2022 y 2023, España tuvo un dato muy elevado de tasa de abandono en el tercer trimestre del año, 15,6% y 14,5% respectivamente. Si nuestro país vuelve a tener un abandono tan alto en el tercer trimestre, un dato que se conocerá a finales de octubre, no se podrá reducir el mínimo que se registró en 2021.

Comparte esta entrada



Leer más
el-lento-ritmo-de-descenso-del-abandono-escolar-pone-en-entredicho-el-objetivo-europeo-del-9%-en-2030

El lento ritmo de descenso del abandono escolar pone en entredicho el objetivo europeo del 9% en 2030

Comparte esta entrada



La tasa de abandono es la media de 4 trimestres del año del porcentaje de población entre 18-24 años que no ha finalizado Bachillerato, FP Media o FP Básica y, que, no habiendo titulado en estos tres niveles educativos, no ha realizado un curso de formación en las últimas cuatro semanas. Los datos oficiales del Ministerio de Educación, FP y Deportes hechos públicos el lunes 29 de enero muestran que la tasa de abandono en España en 2023 ha disminuido desde el 13,9% de 2022 al 13,6% de 2023. Aunque aún no se conocen los datos de la UE para este año, si nos basamos en la información de 2022, parece que España va a continuar siendo el segundo país comunitario con más jóvenes que no continúan sus estudios, tan solo mejor que Rumanía y a cierta distancia del antepenúltimo Hungría. La media de la UE-27 en 2022 fue del 9,6%. La tasa de abandono del 13,6% en España en 2023 nos sitúa aún lejos del objetivo de la UE en Educación y Formación (Education and Training Monitor Report de la UE) para 2030 de situarse en el 9%. Con un ritmo de disminución de 3 décimas no parece que nuestro país vaya a poder situarse en ese umbral dentro de 7 años.  


El gráfico 2 muestra las tasas de abandono temprano en la educación por comunidades autónomas. Hay una gran heterogeneidad en el abandono, con Navarra (6,3%), País Vasco (6,4%), Cantabria (7,4%) o Galicia (8,8%) ya con registros por debajo del objetivo de la UE para 2030 del 9,0%. En todas las CC. AA., el abandono temprano de la educación es más bajo entre las mujeres que entre los hombres, en algunos casos incluso la mitad, como en Navarra (3,8% por 9,0%) o La Rioja (3,9% por 14,5%). 


En cualquier caso, es interesante comprobar que la diferencia en la tasa de abandono entre hombres y mujeres se ha reducido considerablemente en los últimos años en España. En 2002 la diferencia entre la tasa masculina (37,2%) y femenina (24,3%) era de 12,9 puntos porcentuales. Ahora, en 2023, después de 3 años consecutivos de mejor comportamiento relativo de los hombres, esa diferencia se ha reducido a 4,5 puntos porcentuales. Incluso en términos porcentuales, los 12,9 puntos de distancia en 2002 eran un 42% de la tasa de abandono en España ese año (30,9%) mientras que los 4,5 puntos porcentuales de diferencia en 2023 son el 33% de la tasa de abandono del 13,6%. Y es que a medida que se baja la tasa de abandono más difícil es lograr reducirla, como muestra el caso de las mujeres que parten de niveles de abandono inferiores a los hombres, por lo que resultado más complicado disminuirla más. Lo mismo ocurre entre las comunidades de Navarra y País Vasco, que tenían tasas de abandono más bajas en 2022 (5,7% y 5,6% respectivamente) que en 2023 (6,3% y 6,4%)

La resistencia a bajar el abandono cuando se van teniendo tasas más bajas va a requerir nuevas medidas educativas. Con la pandemia, los indicadores educativos de promociones mejoraron mucho y esa inercia inicial se ha perdido. Una potente oferta educativa podría evitar que estudiantes que, de no haber sido por la pandemia habrían dejado los estudios, los abandonen un poco más tarde. Es posible que los jóvenes a los que en mayor medida les afecta la tasa de abandono sean ya de colectivos de características singulares a los que sea más difícil llegar y a los que habrá que ayudar con medidas muy bien dirigidas, bien analizadas y evaluadas de forma constante. El miércoles 31 de enero dedicamos una jornada virtual a evaluar posibles medidas educativas que España podría llevar a cabo para disminuir la tasa de abandono. Pueden ver el acto tanto en directo como una vez terminado, en el canal de YouTube de Funcas.

Comparte esta entrada



Leer más

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies