La Bolsa de Hong Kong ha dado por cerrada la etapa bursátil de China Evergrande Group al cancelar definitivamente su cotización, después de que los títulos llevasen suspendidos desde el 29 de enero de 2024 por la orden de liquidación dictada por un tribunal.
La decisión se produce tras expirar el límite reglamentario de 18 meses de suspensión continuada, y llega después de que la promotora comunicara el 12 de agosto que no pediría revisar la medida, al no cumplir las exigencias de reanudación marcadas por HKEX.
Qué decidió Hong Kong y por qué
El regulador hongkonés puede excluir a una compañía si no reanuda la negociación en ese plazo de 18 meses; en el caso de Evergrande, se requería, entre otras condiciones, retirar o desestimar la orden de liquidación, relevar a los administradores judiciales, publicar estados financieros pendientes y acreditar la idoneidad de su cúpula.
Al no alcanzarse esos hitos, la bolsa ejecutó la cancelación de la cotización. Cuando se congeló el valor, las acciones cotizaban en torno a 0,16 dólares hongkoneses, tras desplomarse un 99,5% desde el máximo histórico de 31,55 HKD marcado en 2017.
La empresa ha avisado a accionistas e inversores de que los títulos seguirán existiendo, pero dejarán de negociarse en Hong Kong y ya no estarán sujetos a las reglas del mercado.
De la euforia a la intervención: la cronología
Evergrande salió a bolsa en 2009 y vivió su apogeo bursátil en 2017, pero en 2021 encendió todas las alarmas al advertir de posibles impagos por falta de liquidez, con un endeudamiento descomunal.
En marzo de 2023 la compañía presentó una propuesta de reestructuración para cerca de 20.000 millones de dólares de deuda offshore, sin convencer a los acreedores y con múltiples vistas judiciales aplazadas.
El 29 de enero de 2024, el Tribunal Superior de Hong Kong ordenó la liquidación de China Evergrande Group y nombró a Edward Middleton y Tiffany Wong (Alvarez & Marsal Asia) como liquidadores del conglomerado.
Al superar en julio de 2025 el tope de 18 meses de suspensión sin que se hubieran cumplido los requisitos, HKEX procedió a ejecutar la exclusión en agosto, culminando el proceso.
La raíz del problema: deuda y ‘tres líneas rojas’
El modelo de negocio se apoyó durante años en un apalancamiento agresivo y en ventas sobre plano: se estimó que la promotora llegó a tener 1,4 millones de viviendas comprometidas y sin construir cuando estalló la crisis.
El pasivo superó los 300.000 millones de dólares, lo que colocó a Evergrande como el promotor más endeudado del mundo y la dejó extremadamente expuesta a cambios de ciclo.
En 2020, Pekín impuso las ‘tres líneas rojas’, un conjunto de límites para reducir el endeudamiento del ladrillo y restringir el acceso a nueva financiación a las firmas más apalancadas.
La nueva disciplina financiera cerró el grifo con rapidez y aceleró las tensiones de caja, en un contexto donde las autoridades ven la vivienda como un bien de uso y no un activo para especulación masiva.
Un mercado enfriado y el efecto dominó
El frenazo del sector tras la política de ‘cero covid’ y la pérdida de confianza de los compradores contribuyeron a la caída de ventas: -24,3% en 2022, -8,5% en 2023 y -12,9% en 2024, según datos oficiales.
Sumando actividades relacionadas, el ladrillo llega a representar en torno al 30% del PIB; cuando el ciclo se da la vuelta, el impacto se extiende a construcción, materiales y consumo.
Los paquetes de apoyo (rebajas hipotecarias, garantías y medidas de estímulo) han tenido efecto limitado hasta ahora, con precios y confianza todavía en niveles frágiles.
El caso Evergrande se ha convertido en la cara visible de un ajuste más amplio, al evidenciar que el crecimiento basado en deuda y preventas carecía de red de seguridad suficiente.
Liquidación: qué pueden esperar acreedores y accionistas
La mayor parte de los activos está en la China continental, lo que plantea retos de coordinación entre jurisdicciones; los liquidadores han activado acciones para maximizar recuperaciones mediante ventas y reclamaciones.
Un análisis utilizado por la propia compañía llegó a estimar que los acreedores podrían recuperar en torno a un 3,4% de sus créditos en escenario de liquidación, un porcentaje sujeto a fuertes incertidumbres.
Para los accionistas, la exclusión implica que, aunque los títulos permanecen vigentes, dejan de estar listados en Hong Kong, pierden liquidez y no se benefician de la supervisión de mercado.
La prioridad oficial pasa por terminar viviendas para compradores afectados, mientras que los litigios y la ejecución de garantías marcarán el día a día del proceso concursal.
Escándalos contables y gobernanza bajo lupa
En 2023, las autoridades impusieron una multa de alrededor de 578 millones de dólares a la principal filial por inflar ingresos por más de 78.000 millones y beneficios por 12.700 millones.
La dimensión del fraude se ha calificado como muy superior a casos célebres como Enron, y derivó en sanciones y suspensión temporal para la auditora PwC por su papel en las cuentas.
El fundador, Xu Jiayin (también conocido como Hui Ka Yan), pasó a estar bajo arresto domiciliario en medio de pesquisas por posibles actividades ilegales, agravando la crisis reputacional.
Desde 2021, Evergrande acumula pérdidas cercanas a 90.000 millones de dólares y llegó a solicitar protección por bancarrota en Estados Unidos para blindar activos en el exterior.
Hitos esenciales del caso
La siguiente tabla resume los momentos clave que condujeron a la exclusión de mercado y al proceso de liquidación en Hong Kong.
Hito | Fecha | Dato clave |
---|---|---|
Salida a bolsa (HK) | 2009 | Debut en el parqué de Hong Kong |
Máximo histórico | 2017 | 31,55 HKD por acción |
Alertas de impago | 2021 | Deuda superior a 300.000 millones USD |
Orden de liquidación | 29/01/2024 | Nombramiento de Edward Middleton y Tiffany Wong |
Límite de suspensión | 07/2025 | Se cumple el umbral de 18 meses sin cotizar |
Exclusión de HKEX | 08/2025 | Cancelación definitiva de la cotización |
La fotografía que deja el caso es la de un gigante que simbolizó el ascenso del ladrillo chino y que hoy refleja sus desequilibrios: financiación cortada, ventas a la baja, fraudes contables y procesos judiciales cruzados, con la Bolsa de Hong Kong cerrando la puerta mientras los liquidadores tratan de rescatar valor donde aún lo haya.