Todo lo que sabíamos de Triodos Bank desde hace 10 años que explican el escándalo actual de los CDAs
Triodos Bank es (o quizá era) una referencia en la denominada banca ética. En esta categoría entran bancos que, siguiendo unos principios éticos, deciden no financiar ciertos sectores o directamente se dedican únicamente a financiar cierto tipo de proyectos.
Y lo cierto es que el capitalismo ofrece las herramientas adecuadas para que los consumidores, a través de nuestras decisiones de compra e inversión, potenciemos ciertos sectores frente a otros. Tener el dinero en un banco con ciertos principios éticos es una forma legítima e interesante. El problema viene cuando dichos principios son en realidad opacos y nos llevan a escándalos como el de Triodos Bank.
El escándalo de las CDAs, las nuevas "preferentes"
Recientemente ha saltado el escándalo de Triodos Bank. El asunto es que vendió a sus clientes un producto financiero llamado CDAs (certificados de depósito de acciones). Este producto proporcionaba unos dividendos y aparte se podían vender, siempre a través de Triodos Bank debido a que no cotizaban en ningún mercado.
Estos productos recuerdan bastante a las preferentes de las Cajas españolas. Además son un producto que se parece bastante: el subyacente son las acciones de Triodos pero los poseedores de los CDAs no tienen ningún poder político.
La gente atrapada en este producto están realmente desesperados. Aunque la posibilidad de vender las CDAs fue restringida hace un año recientemente han recibido una quita del 30%. Y aunque Triodos señala que volverá a haber liquidez (seguramente el próximo año) habrá un límite de 2.000 euros por cliente y el 30% de descuento estará ahí (Actualización: Al final del artículo hay una nota aclaratoria de Triodos).
Hace diez años ya lo advertimos
Hace diez años en El Blog Salmón nos enteramos de esta emisión de las CDAs y nos pareció muy mala idea. Tanto que escribimos un artículo muy crítico con la emisión, donde ya señalamos que había falta de transparencia, falta de liquidez y que comprar un certificado de acciones sin poder político era muy mala idea.
Al poco de publicar el artículo desde Triodos nos contactaron y concertamos una entrevista donde se defendieron: sus números eran buenos y las CDAs era su forma de mantener los objetivos éticos de la entidad. Las explicaciones fueron muy escasas, la verdad, y la prueba de que el producto no era bueno la tenemos en la actualidad.
Otras bancas éticas son posibles
A raíz de la polémica de Triodos con su emisión de CDAs y las explicaciones que dieron, desde El Blog Salmón decidimos hacer un análisis de las ofertas de banca ética que había en dicho momento. Aunque hace ya nueve años de dicha serie de artículos en muchas ocasiones sigue teniendo validez. Y como se puede comprobar Triodos, aunque era la opción más reconocida, no era, ni mucho menos, la mejor.
¿Lecciones del escándalo? Pues sería dos: primero, que a pesar de todos los pufos que ha habido en la banca española en la época de 2007-2011, todavía quedan cosas coleando. Y que los comerciales, con sus mensajes bonitos, son capaces de convencer a los consumidores de las bondades de productos que nunca deberían haber llegado a los minoristas. Parece que no aprendemos, pero yo sigo esperando que con cada escándalo estemos un poco más cerca de tomar el control real de las finanzas personales.
Triodos Bank nos ha contactado a raíz de la publicación del artículo para aclarar lo siguiente:
1.- Por un lado, el 15 de febrero, Triodos Bank anunció el Programa de Recompra Restringida con una dotación de 14,4 millones de euros y al que cada titular puede solicitar participar con una cantidad máxima de 2.000 €.
2.- Por el otro, una vez se ponga en marcha el SMN (Sistema Multilateral de Negociación) que será efectivamente el próximo año, no habrá una cantidad límite por cliente. Las personas titulares de CDA determinarán voluntariamente con su criterio, tal y como sucede en el resto de mercados públicos, cuándo vender, cuándo mantener y cuándo comprar títulos, de acuerdo a sus intereses y apetito inversor.