Incentivos para posponer la jubilación: más vale tarde que nunca
España tiene un problema demográfico que ya está empezando a hacerse notar en el sistema de Seguridad Social. Cada vez nacen menos niños y la esperanza de vida es mayor, lo que supone que cada vez tenemos menos cotizantes.
Además, ya no llegan tantos extranjeros a trabajar a España como en la época burbujil, de hecho, hay alrededor de un millón de puestos de empleo sin cubrir en España (a pesar de que tenemos tres millones de parados, cosa curiosa).
Es decir, que cada vez entran menos ingresos por cotizaciones sociales y se pagan más pensiones de jubilación. Por ello, el Gobierno quiere paliar este desfase tirando de lo que tiene, esto es, jubilados.
Escrivá, un ministro que tiene muchas ideas, ya ha encontrado una 'solución' (más bien un parche) para esta situación: permitir que las personas en edad de jubilación sigan trabajando, incluso por encima de los 70 años.
Pero, ¿será esto suficiente?
Apurar para cuadrar las cuentas
Lo que Escrivá quieren proponer a los sindicatos es que los jubilados que quieran y puedan sigan trabajando superados los 67 años (la edad de jubilación oficial) y así cobren menos de la Seguridad Social.
En concreto, cobrarían la mitad de su pensión más el sueldo que les corresponda. Pero eso sin elevar la edad de jubilación, esto sería totalmente voluntario. De hecho, esto ya lo propuso el gobierno del PP en 2013, la llamada 'jubilación activa', pero entonces muchos pusieron el grito en el cielo.
Si bien ahora urge más. Porque la reforma que se llevó a cabo en diciembre pasado del sistema de pensiones no basta para cuadrar las cuentas, por lo que hay que tomar medidas excepcionales, y esta sería una de ellas.
De hecho, muchos lo agradecerán, porque en España, al contrario que en el resto de Europa, está más implantada la jubilación anticipada que la demorada. De hecho, hay muy bajo número de trabajadores en el rango de 55 a 74 años, pues muchas empresas a partir de los 55 prejubilan a sus empleados.
Algo que muchas personas no quieren, pues con esa edad todavía son muy válidas para trabajar, también muchos que superan los 67 años. Quieren seguir trabajando y hasta ahora no se les permite, pero si esto se lleva adelante podrán. Algo que vendrá muy bien al sistema.
Lo que no está claro es si bastará para solucionar la compleja ecuación de las pensiones en España. Porque España cada vez tiene mayor gasto público (buena parte en pensiones) y los ingresos menguan y no sirven para alimentar toda esa maquinaria.
Por lo que la imaginación de Escrivá va a tener que trabajar duro para intentar que este sistema no falle y no comprometer más la economía española.