A pesar de un año bajista los ETFs, siguen siendo un producto financiero en auge
La gestión pasiva ha colocado a los ETFs como un producto altamente demandado por la capacidad que tienen de seguir al mercado con costes bajos y una elevada liquidez. Pero está siendo un año bajista para el mercado, siendo el sector tecnológico su principal catalizador. En este entorno es interesante analiza cómo han evolucionado las entradas de dinero en estos productos financieros.
Y es en este punto que los números de los ETFs sobresalen. Si tomamos los datos hasta la mitad del año, vemos que las acciones mundiales perdieron un 17,67% y los bonos de grado de inversión de Estados Unidos un 10,35%. Y, como contrapunto, los ETFs estadounidenses superan los niveles de todo el año para cada año desde 1993-2016, casi igualan los flujos de todo el año 2018 y 2019, y equivalen al 64% de los flujos de todo el año 2020. Mientras que los inversionistas globales se deshacen de acciones y bonos, los clientes de ETF asumen la posición compradora.
Los inversores estadounidenses sumaron 212.000 millones a los ETFs de acciones durante la primera mitad del año. Esta referencia es más elevada que los niveles de todo el año 2016, 2018 y 2019, y no muy lejos de los 241.000 millones de 2020. A este ritmo, los flujos anuales de ETFs de renta variable serán los segundos más altos de la historia, fuera de 2021.
Si bien estamos en una demanda históricamente importante, y es que se está premiando la búsqueda del dividendo. Para entenderlo, Los inversores persiguen los ETFs de alta rentabilidad de dividendos, agregando 31.000 millones, frente a 22.000 millones para todo 2021. Es difícil saber si es una operación táctica o una simple alternativa de renta fija para los inversores que esperan un entorno de tasas al alza a largo plazo. Los fondos cotizados sectoriales, que comprendían el 15,5% de los ETF de renta variable, registraron salidas.
El Europa los datos también están siendo de récord. Las entradas netas en estos ocho meses han sido de 66.580 millones de dólares, siendo las terceras más altas registradas, después de las entradas netas en el mimo perido 138.930 millones en 2021 y las entradas netas de 78.110 millones en 2017.
Los ETF y ETP de renta variable que cotizan en Europa obtuvieron entradas netas de 44.350 millones de dólares hasta la fecha en 2022, que son las terceras más altas registradas, después de las entradas netas de 44.980 millones de dólares hasta la fecha en 2017 y 101.180 millones de dólares hasta la fecha en 2021.